Brasil ultima el futuro de Ancelotti.

La Confederación Brasileña de Fútbol se prepara para firmar un nuevo contrato con Carlo Ancelotti.

Carlo Ancelotti está a punto de extender oficialmente su histórica trayectoria con la selección brasileña. Según fuentes españolas, la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) ha llegado a un acuerdo completo con el entrenador italiano para un nuevo contrato válido hasta 2030. La ceremonia de firma y anuncio es solo una formalidad.

Desde la llegada de Ancelotti a Río de Janeiro, la directiva de la CBF, encabezada por el presidente Samir Xaud, lo identificó como la opción a largo plazo. Brasil necesitaba un verdadero líder en el banquillo, alguien con la credibilidad suficiente para reconstruir el equipo y devolver a la Seleção su posición de principal aspirante. Ancelotti está cumpliendo plenamente con ese requisito.

La huella del estratega que más títulos de Champions ha ganado en la historia no solo reside en su experiencia, sino también en su liderazgo en el vestuario. La decisión de excluir a Neymar de la convocatoria es un claro ejemplo. En Brasil, Neymar no es solo un jugador, sino también un icono con influencia mucho más allá del terreno de juego. Ancelotti entiende la presión, pero aun así prioriza el bien colectivo.

El nuevo contrato mantendrá a Ancelotti entre los entrenadores mejor pagados de la selección nacional ( entre 10 y 11 millones de dólares al año). Esta remuneración refleja las enormes expectativas que Brasil deposita en él. La presión en la Seleção no es diferente a la que experimentó Ancelotti en el AC Milan, la Juventus, el PSG, el Bayern de Múnich o el Real Madrid: todas las cimas que ha conquistado.

La llegada de Ancelotti cambió inmediatamente la percepción de Brasil. La afición ganó confianza, los jugadores lo respetaron y los expertos creyeron que la Seleção había recuperado la estabilidad. Brasil volvió a ser mencionado como un fuerte candidato para el Mundial de 2026, que se celebrará en Estados Unidos, Canadá y México.

La CBF quiere enviar un mensaje claro antes del gran evento: su confianza está plenamente depositada en Ancelotti, independientemente del resultado del próximo Mundial. Extender su contrato anticipadamente demuestra una estrategia a largo plazo, en lugar del enfoque miope que una vez desvió al fútbol brasileño.

Al firmar el contrato, Ancelotti no sólo siguió liderando la selección nacional más tradicional del mundo , sino que también se convirtió en un símbolo de la ambición de Brasil de revivir el fútbol en la nueva década.

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