Los primeros días del nuevo año marcan el cambio más especial del año en la naturaleza. El frío invierno, con sus ramas secas y sin hojas, se desvanece gradualmente. Tras las lluvias primaverales, de esas ramas secas brotarán brotes verdes, intercalados con diminutos capullos. Todo parece revitalizarse tras un largo letargo invernal. Miles de flores florecen por doquier. Acompañemos a la revista Heritage a admirar las flores primaverales en un viaje por los valles de las montañas del norte.
Revista Heritage
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