La carrera por recortar los tipos de interés a nivel mundial se está intensificando.

Al término de la reunión de política monetaria del 12 de junio, los funcionarios de la Reserva Federal (Fed) de EE. UU. anunciaron que mantendrían las tasas de interés sin cambios en el rango del 5,25 % al 5,50 %. Esta es la séptima vez que la agencia "congela" las tasas de interés y no escapa a las especulaciones previas de los observadores.

Sin embargo, el punto destacado que los mercados esperan es que las autoridades de la Fed hayan señalado públicamente que solo habrá un recorte de tipos de interés este año. Si bien este pronóstico es más limitado que las especulaciones sobre tres recortes para marzo de 2024, muestra en parte una clara señal de que la Fed revertirá su política monetaria restrictiva, abriendo una nueva era para los tipos de interés.

Desde principios de año, Suecia se ha convertido en el primero entre los 10 países y regiones con las monedas más comercializadas del mundo (incluidos Estados Unidos, la Unión Europea (UE), Japón, el Reino Unido, China, Canadá, Suiza, Australia, Suecia y Noruega) en recortar los tipos de interés el 8 de febrero. Suiza le siguió el 21 de marzo.

El 5 y el 6 de junio, dos de los bancos centrales más grandes del mundo, el Banco de Canadá (BoC) y el Banco Central Europeo (BCE), también bajaron sus tipos de interés. Ambos bancos redujeron los tipos de interés en 0,25 puntos porcentuales. Esta es la primera vez que el BoC baja los tipos de interés desde marzo de 2020, y el BCE lo hace por primera vez desde 2019.

Los líderes del BCE enfatizaron que la reducción de tipos era necesaria para impulsar el crecimiento económico y garantizar que la inflación se mantuviera cerca del objetivo del 2%. El Consejo de Gobierno del BCE declaró que, basándose en una evaluación actualizada de las perspectivas y los factores que influyen en la inflación y la política monetaria, consideró apropiado ajustar el grado de moderación de la política monetaria tras nueve meses de mantener estables los tipos de interés. Al iniciar anticipadamente el proceso de reducción de los tipos de interés, el BCE espera revitalizar el mercado inmobiliario, la inversión empresarial y el gasto de los consumidores de la UE.

Los fuertes movimientos del BCE, así como del BoC o del Banco Nacional Suizo (SNB), fortalecen las expectativas del mercado sobre la respuesta de la política monetaria de la Fed, junto con datos positivos de la economía estadounidense.

Al evaluar las perspectivas de la política monetaria de la mayor economía del mundo, los observadores creen que los tipos de interés no se ajustarán hasta septiembre. El hecho de que Estados Unidos mantenga tipos de interés más altos que muchos otros países desarrollados atraerá capital extranjero al país, que se beneficiará del diferencial de tipos de interés.

El repentino aumento de efectivo podría inyectar liquidez al sistema financiero en un momento en que la Reserva Federal intenta controlar los precios. Esto dificultaría que la Reserva Federal flexibilizara su política monetaria y obstaculizaría su objetivo de un "aterrizaje suave" de la economía estadounidense si las tasas de interés se mantienen altas durante un período prolongado.

En su pronóstico actualizado de las perspectivas económicas mundiales para 2024, publicado el 11 de junio, el Banco Mundial (BM) advirtió sobre un escenario de tasas de interés “más altas por más tiempo”.

El fuerte aumento de los tipos de interés ha reducido la inflación, pero no ha provocado pérdidas generalizadas de empleo ni otras perturbaciones en Estados Unidos ni en otras economías importantes, afirmó Ayhan Kose, economista jefe adjunto del Banco Mundial. «Esa es la buena noticia. Pero la mala es que podríamos estar atrapados en el carril lento», añadió.

El Banco Mundial ha revisado al alza sus perspectivas de crecimiento económico mundial para 2024, del 2,4 % previsto en enero de 2024 al 2,6 %. La organización también prevé un crecimiento mundial del 2,7 % tanto en 2025 como en 2026. Sin embargo, estas cifras de crecimiento siguen siendo bajas en comparación con el crecimiento mundial promedio del 3,1 % del período 2010-2019.

El Banco Mundial también pronostica que las tasas de interés globales durante los próximos tres años seguirán siendo el doble de su promedio del período 2000-2019, lo que frenará el crecimiento y aumentará la presión sobre los países de mercados emergentes que han tomado préstamos en dólares.

En Europa, es probable que el Banco de Inglaterra (BoE) congele su tasa de interés base en su reunión del 20 de junio hasta las elecciones generales de julio de 2024. Sin embargo, los indicadores económicos, especialmente los precios al consumidor del Reino Unido en mayo de 2024, alcanzaron un mínimo de seis meses, lo que aumenta las expectativas de que el país reduzca las tasas de interés pronto este año.

También se espera que el banco central de Noruega comience a recortar las tasas de interés a partir de septiembre de 2024, con solo un recorte este año, de 0,5 puntos porcentuales.

No se espera que las dos restantes de las 10 monedas más negociadas del mundo ajusten sus tipos de interés a corto plazo, al menos hasta principios de 2025. Japón, cuya política de tipos de interés discrepa con la del resto del mundo, elevó los tipos de interés desde niveles negativos al 0-0,1 % en marzo de 2024 por primera vez en 17 años. Mientras tanto, en Australia, los precios aún no son lo suficientemente estables como para proporcionar una base sólida para que el Banco de la Reserva de Australia (RBA, el banco central) actúe.

Fuente: https://doanhnghiepvn.vn/kinh-te/cuoc-dua-ha-lai-suat-toan-cau-bat-dau-nong-len/20240614100045291