
Es urgente revisar las políticas fiscales para garantizar que las empresas puedan operar con tranquilidad en 2026.
Muchas presiones para la reforma
A medida que se acerca el año 2026, el sistema tributario continúa enfrentando presión para reformas, mientras que la comunidad empresarial anhela un entorno transparente y predecible con riesgos legales minimizados. Los problemas derivados de la Ley del Impuesto al Valor Agregado de 2024 se hicieron evidentes rápidamente a los pocos meses de su promulgación, obligando al Ministerio de Hacienda a presentar enmiendas a la Asamblea Nacional, lo que demuestra la proactividad del organismo regulador para abordar las repercusiones prácticas.
El Ministro de Finanzas, Nguyen Van Thang, enfatizó que, si bien la nueva ley solo lleva unos meses en vigor, proponer nuevas modificaciones es una decisión difícil pero necesaria, ya que las nuevas regulaciones "afectan directamente a todas las actividades de contratación agrícola, forestal y pesquera a nivel nacional, lo que genera importantes dificultades para las empresas y afecta la vida de las personas". Por lo tanto, el Ministerio de Finanzas ha propuesto restablecer las regulaciones vigentes desde 2016, que permiten a las empresas eximirse de declarar el impuesto sobre la salida en la fase comercial, a la vez que pueden deducir el impuesto sobre la entrada. Según el Ministro, esta es "una medida que garantiza la verdadera naturaleza del IVA y combate el fraude, a la vez que reduce la carga procesal para las empresas".

El Ministerio de Finanzas ha propuesto permitir que las empresas estén exentas de declarar el impuesto de salida en la etapa comercial y al mismo tiempo puedan deducir el impuesto de entrada válido.
No es solo la agricultura la que enfrenta dificultades bajo la nueva normativa que exige a los compradores demostrar que los vendedores han declarado y pagado impuestos; algo que "los compradores no pueden verificar las obligaciones fiscales del vendedor", como señaló el Ministerio de Justicia . El ministro Nguyen Van Thang advirtió que esta situación se está extendiendo a otros sectores. La industria siderúrgica es un claro ejemplo: las empresas que compran chatarra a particulares sin facturas se enfrentan a cuellos de botella en las deducciones del impuesto sobre insumos. Si no se abordan con prontitud, estas deficiencias debilitarán la capacidad de recuperación de la economía.
Durante un reciente debate en la Asamblea Nacional sobre este tema, el representante Huynh Thanh Chung (Dong Nai) argumentó que la enmienda es "necesaria", enfatizando que la agricultura se caracteriza por operaciones a pequeña escala y bajos rendimientos. Subrayó que imponer una fuerte carga fiscal a los agricultores distorsionaría el objetivo de apoyo y contradiría la política de exenciones y reducciones fiscales para la agricultura y los agricultores. Precisamente por eso, las empresas esperan ajustes oportunos para lograr un equilibrio entre la gestión fiscal y las prácticas de producción.
Mientras tanto, este proyecto de enmienda a la ley introduce tres puntos importantes: restablecer el mecanismo de deducción para adaptarlo a las actividades agrícolas; garantizar la igualdad fiscal entre los piensos de producción nacional y los importados, dado que los insumos nacionales están actualmente sujetos a un impuesto del 5%; y eliminar el requisito de que los compradores solo puedan recibir devoluciones de impuestos después de que el vendedor las haya declarado, a la vez que se trasladan las normas de gestión a la Ley de Administración Tributaria modificada para una supervisión unificada de las devoluciones de impuestos. Estos ajustes se consideran razonables, ya que se derivan de una evaluación de sus impactos prácticos y reflejan la dinámica de la economía.
Confianza en la reforma
Pero para que las empresas lleguen con confianza al 2026, modificar la ley es solo el comienzo. Lo que las empresas también necesitan es un mecanismo de aplicación flexible, justo y predecible. Los relatos de la reciente Conferencia de Diálogo Empresarial-Gobierno de Ciudad Ho Chi Minh también muestran que la brecha entre las regulaciones y la realidad sigue siendo amplia. El factor K en la advertencia de riesgo de la factura electrónica es prueba de ello: si bien el objetivo de la gestión es legítimo, el método de implementación causa pérdidas a las empresas.

Muchas empresas están interesadas en la Conferencia de Diálogo Empresarial-Gobierno de Ciudad Ho Chi Minh.
Un representante de Daikin declaró que las alertas automáticas enviadas a los socios perjudicaron la reputación de la empresa, mientras que la discrepancia entre la información ingresada y la generada se debió principalmente al momento de la emisión de la factura de la empresa matriz. De igual manera, el contrato de Bach Sen se canceló simplemente porque el sistema de alerta se emitió antes de que la empresa tuviera la oportunidad de explicar su postura. Estas consecuencias demuestran, como han señalado los expertos fiscales, que la tecnología solo es verdaderamente efectiva cuando existe una "demora humana", lo que permite el diálogo antes de que se tomen decisiones automatizadas.
Además, el problema de las devoluciones de impuestos sigue siendo un cuello de botella persistente. La empresa textil y de confección Thanh Cong declaró que su solicitud de devolución de impuestos se retuvo para una verificación adicional, a pesar de que todos los documentos estaban completos y las mercancías, que claramente ingresaban al depósito aduanero, tenían derecho a una tasa impositiva del 0%. Las autoridades fiscales de Ciudad Ho Chi Minh explicaron que la verificación tenía como objetivo garantizar la precisión, pero la empresa espera tiempos de procesamiento más rápidos y transparentes para evitar un estancamiento prolongado del capital, un factor importante en el contexto de los altos costos de los intereses y las presiones de flujo de caja que afectan gravemente al sector manufacturero.
La preocupación por el riesgo de ser objeto de cobros tributarios retroactivos debido a "negocios fantasma" también está generando dudas en muchas empresas. Un representante de IPL Company declaró que, a pesar de una verificación exhaustiva, seguían sujetos a cobros tributarios retroactivos varios años después, ya que se descubrió que el vendedor había infringido la normativa. Las autoridades fiscales recomiendan que las empresas desarrollen sus propios mecanismos de control interno y revisen proactivamente las facturas en hoadondientu.gdt.gov.vn y gdt.gov.vn. Este es un enfoque razonable, pero también pone de relieve la necesidad de mejorar el ecosistema tributario, donde tanto el organismo gestor como los contribuyentes cuenten con herramientas eficaces de prevención de riesgos.
2026 solo será un año de verdadera recuperación y avance si las empresas se sienten seguras para invertir, expandirse e innovar. Para lograrlo, es necesario abordar el problema fiscal desde la raíz, mediante una combinación de reformas legales, modernización de la gestión y una mejor calidad del servicio. La reforma fiscal no solo consiste en recaudar impuestos de forma correcta y completa, sino también en allanar el camino para una economía fluida, liberar recursos y fomentar el crecimiento a largo plazo. Solo así se fortalecerá la confianza empresarial y el objetivo de crecimiento sostenible en 2026 se hará realidad.
Fuente: https://vtv.vn/giai-bai-toan-thue-de-doanh-nghiep-an-tam-trong-2026-100251209150536135.htm










Kommentar (0)