La historia de Hiroko, una mujer japonesa de 41 años, quien tuvo una aventura amorosa fue relatada en la revista An An. Según el artículo, Hiroko se reencontró con su exesposo, Satoshi, de 45 años, cuando lo invitó a la boda de su hija. Su nuevo esposo, Yuta, de 37 años, aceptó la invitación.
Según Hiroko, ella y su primer esposo se divorciaron tras acumular enormes deudas debido a pérdidas comerciales. Al reencontrarse con su exmarido tras muchos años de separación, Hiroko admitió haberse enamorado de Satoshi una vez más. Y fue Hiroko quien reanudó su relación, a pesar de que él ya se había vuelto a casar.
"Sería desastroso para ambas familias si se descubriera nuestra aventura, así que somos extremadamente cuidadosos. No dejamos ninguna evidencia en forma de mensajes de texto o fotos, y siempre nos reunimos en mi casa cuando mi esposo está de viaje de negocios, y es conveniente porque mi hija se mudó a vivir con su novio", dijo Hiroko .
Hiroko describió su romance con su exmarido como "emocionante" y duró varios meses. Cuando su segundo marido sospechó y revisó su teléfono sin encontrar ninguna prueba, Hiroko, temiendo ser expuesta, informó a Satoshi, quien decidió terminar la relación ante la proximidad de la boda de su hija.
Satoshi también le recordó a su ex esposa que ella tiene un marido legal, que lo que pasó entre ellos fue "puramente para entretenimiento" y que ya no la amaba desde su divorcio.
Un video grabado en secreto de la esposa y su exmarido fue reproducido por el actual esposo en la boda de la hija de su exesposa. (Imagen ilustrativa)
Parecía que todo terminaría en paz. Pero en la recepción de la boda de la hija de Momoka, Yuta subió al escenario con la esperanza de darles a los invitados y a los novios un regalo especial. Inmediatamente después, Yuta reprodujo un video grabado en secreto de su esposa y su exmarido.
Mientras proyectaba el clip en la pantalla, Yuta, sosteniendo un micrófono, declaró: "Estos dos me traicionaron y tuvieron una aventura".
Tras ver el video, Momoka rompió a llorar y gritó: "¡Mamá arruinó mi boda!". A Hiroko no le sorprendió que Yuta revelara su infidelidad en la boda de su hija, ya que su relación nunca había sido buena.
Después del incidente, la hija de Hiroko repudió a su madre y Yuta la echó de la casa que compartían.
"Todos los días tengo que ir de un hotel a otro para llegar a fin de mes. Es difícil encontrar trabajo ahora mismo. Cosechas lo que siembras", dijo Hiroko.
El adulterio en la mujer y las desgarradoras consecuencias que deja.
No recibir simpatía de la sociedad.
Para las mujeres que han cometido adulterio, es muy raro recibir el perdón de sus maridos o la compasión de la sociedad. Incluso en su interior, a menudo viven en el tormento y el auto-reproche, incapaces de perdonar sus propias acciones.
Una mujer que comete adulterio está, en esencia, firmando su propio divorcio. Por mucho que su esposo la ame, la imagen de ella abrazando íntimamente a otro hombre jamás se borrará de su mente.
Una vez que las mujeres se embarcan en la infidelidad, pueden perderse a sí mismas y enfrentarse a la crítica pública. (Imagen ilustrativa)
Daño mental
Cuando tienes una aventura extramatrimonial, vives constantemente en un estado de ansiedad y miedo. Tienes miedo de que te descubran, así que te pasas el día borrando mensajes, revisando correos, etc. Tu mente está ocupada borrando todo rastro, lo que te vuelve improductivo.
Dañar la propia imagen.
Cuando tienes una aventura, la gente te mirará de otra manera, no solo con desprecio y desdén, sino que escudriñarán cada uno de tus movimientos. Recuerda, aunque te sonrían y te hablen, en el fondo solo quieren que desaparezcas de su vista.
Los niños son quienes sufren las consecuencias más severas.
Y la principal consecuencia es que los hijos sufren. Son el vínculo invisible entre ambos padres. Aunque sigan viviendo juntos, sus sentimientos nunca serán tan fuertes como antes. Incluso pueden volverse irritables, discutir y maltratarse físicamente. Y, por supuesto, ningún hijo quiere que sus padres se vuelvan así.
Si deciden separarse, su hijo será el que más sufrirá porque no crecerá en un entorno con el amor pleno de ambos padres, y no recibirá el mismo amor y cuidados que los demás niños.
Tener que ser pasivo... en el divorcio
Una vez que una mujer es sorprendida en pleno divorcio, se enfrenta al riesgo de un "divorcio pasivo". Tras el divorcio, si no tiene un trabajo estable, su calidad de vida inevitablemente se deteriorará significativamente, sin mencionar la dificultad añadida de criar a sus hijos sola y enfrentarse al escrutinio público.
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