La Dra. Mai Dai Duc Anh, especialista en medicina familiar y nutrición del Sistema FarmacéuticoFPT Long Chau, explicó que la sangre hervida es un plato popular en la gastronomía vietnamita. Su aporte calórico depende del tipo de sangre (cerdo, pato, pollo, etc.) y del método de preparación. En concreto, 100 g de sangre de cerdo hervida aportan entre 35 y 40 calorías, mientras que 100 g de sangre de pato hervida contienen entre 24 y 25 calorías. Una porción mediana (unos 50 g) proporciona entre 12 y 20 calorías. Sin embargo, esta cantidad puede variar según el método de preparación, especialmente la consistencia de la sangre y la cantidad de agua que retiene durante la coagulación.
Una porción de 100 g de sangre de cerdo hervida aporta muchas menos calorías que muchos alimentos comunes en las comidas diarias. En concreto, 100 g de sangre de cerdo hervida contienen solo entre 35 y 40 calorías, mientras que 100 g de arroz blanco aportan entre 130 y 150 calorías, es decir, entre tres y cuatro veces más. Un vaso de leche fresca sin azúcar (180 ml) contiene aproximadamente 80 calorías, mientras que un huevo cocido (unos 50 g) aporta entre 70 y 75 calorías.

La sangre hervida es un plato popular en la cocina vietnamita.
Foto: T.Ly
Al comparar la sangre hervida con los alimentos mencionados anteriormente, podemos ver que la sangre hervida es Alimento bajo en calorías, apto para personas a dieta o que controlan su peso si se utiliza correctamente.
Casi sin carbohidratos ni grasas
Una gran ventaja de la sangre hervida es que casi no contiene carbohidratos ni grasas. Esto ayuda a limitar la acumulación de exceso de energía, lo que favorece un control de peso más eficaz, especialmente adecuado para... dieta baja en carbohidratos o cetogénica.
Contiene proteínas y hierro
Aunque no es muy rica en proteínas, la sangre hervida sí aporta una pequeña cantidad de proteínas y hierro. Estos son dos nutrientes esenciales para quienes siguen una dieta, ya que ayudan a reducir el hambre, mantener la masa muscular y prevenir la anemia que suele aparecer al comer menos.
Notas sobre el consumo de sangre hervida para perder peso
Aunque la sangre hervida es un plato bajo en calorías, para garantizar su seguridad y eficacia, los usuarios deben tener en cuenta los siguientes aspectos:
Consuma con moderación . Si bien la sangre hervida tiene pocas calorías, consumirla en exceso de una sola vez o con regularidad puede provocar desequilibrios nutricionales. Por lo tanto, para asegurar el cumplimiento de una dieta de adelgazamiento, cada comida debe limitarse a entre 50 y 100 g.
Priorice la sangre bien cocida. La sangre cruda o poco cocida puede contener bacterias y parásitos perjudiciales para la salud. En particular, las personas que están bajando de peso deben evitar por completo platos como el pudín de sangre y consumir únicamente sangre bien hervida para garantizar la seguridad e higiene alimentaria.
No la combines con vísceras ni platos grasos. Muchos platos populares, como el congee y los fideos con sangre, suelen llevar vísceras y caldo graso, lo que aumenta considerablemente las calorías. Para controlar la energía de forma eficaz, limita la cantidad de sangre que consumes con vísceras. En su lugar, consúmela solo con gachas ligeras o verduras hervidas.
No comas sangre tarde por la noche. Ingerir sangre antes de acostarte, sobre todo si la acompañas con gachas espesas o platos salados, puede provocar fácilmente hinchazón e indigestión. El momento adecuado para comer sangre es a la hora del almuerzo o a primera hora de la tarde, para que el cuerpo tenga tiempo suficiente para digerirla y absorberla eficazmente.
No la consuma como sustituto completo de una comida principal. La sangre hervida no aporta la energía ni los micronutrientes necesarios para una comida completa. Por lo tanto, no considere este plato como un sustituto completo de una comida principal, sino solo como guarnición o tentempié durante el día.
Limite su consumo si padece gota, hiperlipidemia o alguna enfermedad hepática o renal . La sangre hervida contiene niveles elevados de purinas y colesterol, por lo que no es recomendable para personas con gota, hiperlipidemia o problemas hepáticos o renales. Si padece alguna de estas enfermedades, consulte a su médico antes de incorporar la sangre hervida a su dieta.
Prioriza la elaboración casera en lugar de comprar productos ya preparados en las tiendas.
El Dr. Duc Anh afirmó que la sangre comprada en tiendas puede no ser higiénica o contener muchas especias, sal y conservantes que no son recomendables para quienes siguen una dieta. Cocinar la sangre en casa permite controlar los ingredientes y la cantidad de sal, además de garantizar una mayor seguridad alimentaria.
La sangre hervida es un plato rico en hierro, bajo en calorías y puede incluirse en una dieta saludable. Sin embargo, se recomienda consumirla de forma sencilla, evitando combinarla con alimentos grasos y no comerla en exceso ni con demasiada frecuencia.
Fuente: https://thanhnien.vn/tiet-luoc-dang-giam-can-co-nen-an-benh-gi-can-luu-y-185250811115639677.htm






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