Estudios Sociales: Toda madre desea colmar de amor a sus hijos. Sin embargo, en realidad, algunos métodos de crianza pueden causarles problemas psicológicos de por vida.
"¿Qué pasa, hijo? ¿Por qué no escuchas a tu madre?"
"Mamá, ¿puedo jugar un rato con mi amiga?" "No."
"Todavía no he terminado mi tarea. ¡Qué vergüenza!"
La madre de Hien Hien es muy obstinada, no sólo es estricta con su hija sino también con su marido.
Por lo tanto, el padre de Hien Hien rara vez discutía con su madre. Parecía que nunca discutían; su padre hacía lo que su madre quería.
Cuando Hien Hien era pequeña, debido a su curiosidad, a menudo quería encontrar una respuesta poco convencional, pero su madre siempre la restringía diciéndole : "No se te permite tener una respuesta como esa, no se te permite hacer eso".
Tal vez la madre tenía un hábito de liderazgo, queriendo siempre que los demás la obedecieran, y aplicó esa mentalidad a la crianza de sus hijos.
Ahora, cada vez que Hien Hien llega a casa, hace sus tareas en silencio y obedece todas las instrucciones de su madre.
La niña parece haber heredado la actitud perfeccionista de su padre hacia su madre, por lo que ahora rara vez discuten.
Cuando los padres controlan excesivamente a sus hijos, pueden causarles daños involuntarios. (Imagen ilustrativa)
Un psicólogo relató: En una ocasión, aconsejó a un joven de familia acomodada. Había estado enamorado repetidamente, al principio intensamente, pero después de mucho tiempo, sintió que su pareja era demasiado dominante y lo presionaba demasiado, por lo que finalmente decidió romper.
Analizando las razones de sus antecedentes, la psicóloga encontró que la madre del joven también era muy testaruda, tomando muchas decisiones para ayudar a su hijo, incluso aunque a él no le gustaran.
Durante su infancia, el joven se acostumbró a la dependencia. Al enamorarse, se sintió cautivado por este tipo de "amor" y anheló escapar del control.
Al final, se debatió entre dos estados emocionales conflictivos, sin que ninguna de sus relaciones llegara a una conclusión.
Madres como estas cuidarán meticulosamente la vida de sus hijos y creerán que mientras sus hijos estén materialmente satisfechos, eso es suficiente.
No escuchan ni se preocupan por las necesidades reales de sus hijos; sólo quieren organizar todo con la esperanza de que sus hijos crezcan y se desarrollen de acuerdo a sus expectativas.
Los niños de esta familia se esforzarán mucho por cumplir las expectativas de su madre, con la esperanza de recibir su atención y aprecio. Sin embargo, también suelen experimentar miedo, ansiedad e insatisfacción con la vida familiar.
Cuando los niños reciben apoyo no deseado, pueden sentirse inferiores a sus compañeros y carecer de confianza en sí mismos.
La psicóloga Wendy Mogel, autora de libros sobre crianza de los hijos, dice que crecer en un entorno controlador y excesivamente protector hará que los niños tengan dificultades y fracasen en la vida.
Cuando los niños son controlados e impuestos excesivamente por sus padres, pierden fácilmente la confianza en sí mismos. Carecen de empatía, se decepcionan por la falta de confianza de sus padres y pueden volverse retraídos, lo que limita su capacidad para compartir y comunicarse. Mejorar esta relación puede ser muy difícil.
En particular, a estos niños les falta decisión y coraje para desafiarse a sí mismos cuando se enfrentan a las oportunidades que ofrece la vida.
Los expertos creen que el control excesivo de los niños puede generarles miedo a todo y dificultar su capacidad para desarrollar habilidades interpersonales. (Imagen ilustrativa)
El control excesivo puede llevar a que los niños desarrollen dependencia y pierdan gradualmente su capacidad de tomar decisiones, resolver problemas o asumir la responsabilidad de sus propias acciones.
El impacto más negativo del control excesivo sobre los niños es el daño psicológico, que conduce a la ansiedad y la depresión.
Además, el control excesivo puede influir fácilmente en el pensamiento de un niño, creando hábitos poco saludables y un estilo de vida distorsionado a medida que crece.
El control excesivo también impide que los niños experimenten la vida y adquieran conocimientos prácticos.
Por lo tanto, por muy decidido y fuerte que seas, cuando estés con tu hijo, sé más amable. No dejes que sienta que eres distante o frío, porque, sencillamente, no es tu empleado.
Cuando la madre es demasiado fuerte, lo que hace que el padre sea débil, la imagen del padre pierde su fuerza y coraje, y no logra crear un modelo fuerte al que el niño pueda admirar y emular.
Una buena madre iluminará el camino de su hijo en la vida, ayudándole a comprenderse a sí mismo, al mundo y a todos los seres vivos con ojos llenos de amor y compasión...
[anuncio_2]
Fuente: https://giadinh.suckhoedoisong.vn/co-mot-kieu-lam-me-nhin-qua-tuong-tot-nhung-lai-khien-con-gap-kho-khan-trong-cuoc-song-khi-truong-thanh-172241227153650648.htm






Kommentar (0)