Almidón: un combustible esencial
Los carbohidratos son uno de los tres grupos de macronutrientes que aportan glucosa al cerebro y a los músculos. Se recomienda que representen entre el 45 % y el 65 % de la ingesta energética diaria total.
La Dra. Julie Stefanski, nutricionista clínica en EE. UU., enfatiza que los adultos necesitan al menos 130 g de carbohidratos al día para mantener el funcionamiento básico.

Arroz integral, tubérculos... son muy buenos para la salud.
Foto: AI
¿Cómo reacciona el cuerpo a una deficiencia de carbohidratos? Entre 24 y 48 horas después de reducir la ingesta de carbohidratos, las reservas de glucógeno en el hígado y los músculos se agotan. Dado que el glucógeno retiene agua, la pérdida de peso es rápida, principalmente debido a la deshidratación. El cuerpo entonces tiene que descomponer el tejido muscular y quemar grasa para obtener energía, lo que lleva al cuerpo a un estado de cetosis.
Según la experta Samantha Coogan (Universidad de Nevada, EE.UU.), la cetosis puede ayudar a la supervivencia a corto plazo, pero si se prolonga, puede alterar las hormonas y afectar al hígado, la glándula tiroides y el azúcar en sangre, según el sitio web de noticias de salud Verywell Health.
Los efectos secundarios comunes incluyen: Reducir los carbohidratos puede causar fácilmente "gripe cetogénica", con síntomas como fatiga, náuseas, dolor de cabeza y dificultad para concentrarse. A corto plazo, puede causar estreñimiento, insomnio e irritabilidad. A largo plazo, existe el riesgo de desequilibrio electrolítico, colesterol alto, cálculos renales y osteoporosis. En personas con diabetes, la cetosis puede provocar cetoacidosis, una afección potencialmente mortal.
¿Es sostenible la pérdida de peso rápida?
Algunos estudios han observado una pérdida de peso más rápida y un mejor control de la glucemia durante los primeros meses. Sin embargo, el experto Stefanski señala que, después de un año, la efectividad de las dietas bajas en carbohidratos y las equilibradas es prácticamente indistinguible. La mayor desventaja de una pérdida de peso rápida es la dificultad para mantenerla a largo plazo, además de un mayor riesgo de deficiencias nutricionales.
Riesgo de deficiencia de nutrientes
Eliminar los almidones significa eliminar fuentes de alimentos como cereales integrales, patatas, etc. Esto puede conducir fácilmente a deficiencias de vitamina C, folato, vitaminas B, fibra y antioxidantes, aumentando el riesgo de enfermedades cardíacas, trastornos digestivos e incluso algunos tipos de cáncer.
¿Por qué es necesario el almidón?
Los carbohidratos no solo aportan energía, sino que también favorecen la recuperación muscular, la regeneración tisular y el mantenimiento de la resistencia. Los alimentos ricos en carbohidratos saludables, como el arroz integral, el boniato, la avena, los frijoles y las verduras, también aportan vitaminas, fibra y minerales esenciales, según Verywell Health.
Asesoramiento de expertos
Eliminar el arroz por completo no es una solución segura. En lugar de eliminarlo, opte por carbohidratos saludables como arroz integral, avena, batata, frijoles, frutas y verduras. Estos alimentos proporcionan energía sostenible y son ricos en fibra, vitaminas y minerales. Combine esto con una dieta equilibrada y sostenible para un control de peso y una salud a largo plazo.
Fuente: https://thanhnien.vn/so-map-kieng-tinh-bot-dieu-gi-thuc-su-dien-ra-trong-co-the-185250911233650125.htm






Kommentar (0)